Como vive el sector importador y exportador de colombia la fortaleza del peso frente al dolar - Cesce Colombia
11 sep 2023
¿Cómo vive el sector importador y exportador de Colombia la fortaleza del peso frente al dólar?
Pese a la apreciación del dólar en los últimos días, debido a la desaceleración de China y una posible baja en la demanda de los commodities, el peso colombiano sigue siendo la moneda más fuerte de la región, con una valorización que ronda el 17 % frente al billete verde en lo corrido del año.
El no avance de algunas ambiciosas reformas del presidente colombiano Gustavo Petro y la recuperación post pandemia de la economía, asoman como las principales razones de esta apreciación. Esto se traduce en ciertos beneficios y perjuicios para la economía del país, siendo especialmente sensibles los sectores que transan habitualmente en dólares, como los dedicados al comercio transfronterizo.
En el caso del sector importador de Colombia, la situación cambiaria es positiva, dado que ayuda a desacelerar el costo de alimentos importados y materias primas, lo cual podría permitir que la inflación disminuya más rápido y las tasas de interés puedan llegar a bajar en el último trimestre del año. En tanto, para el sector exportador, una tasa de cambio depreciada con un dólar débil frente al peso, afecta directamente a sus ingresos, lo que sumado a altos costos de producción, redunda en tener que vender hacia el extranjero de manera menos competitiva. Esta situación deteriora el margen e impacta negativamente la rentabilidad y flujos de caja en compañías dedicadas a este rubro.
Para Manuel Arévalo, presidente & CEO de Cesce Colombia, empresa aseguradora especialista en las áreas de crédito y cumplimiento y experta en gestión de riesgo empresarial:
“El dólar con el precio actual refleja de mejor manera la situación económica y fiscal del país, lo cual puede ayudar a dinamizar la economía que ha venido ralentizada de manera fuerte, lo que se ha visto reflejado en el deterioro en el comportamiento de pago de gran parte de las empresas, consideró que era necesario que la tasa de cambio corrigiera la acelerada depreciación que se dio por la coyuntura económica global derivada de la pandemia y que viene dando algunos signos positivos de recuperación.”
A pesar de esta mejora, el tipo de cambio aún no recobra el valor que tenía previo a la emergencia sanitaria producida por el Covid-19 y la incertidumbre política se mantiene latente.
Además, cabe resaltar que el peso colombiano ha sido históricamente sensible a las fluctuaciones en el precio del dólar. Ante este escenario, es necesario tomar ciertas medidas para quienes negocian con la divisa estadounidense. Para el sector importador, este podría ser un buen momento para buscar liquidez y pagar sus obligaciones en dólares aprovechando el precio. Mientras que los exportadores, deben buscar en el corto plazo eficiencias productivas, operativas y/o financieras para contrarrestar los menores ingresos.
Manuel Arévalo, también señala que “como lección aprendida, los exportadores deberían definir mecanismos de cobertura que les permita minimizar el impacto de la alta volatilidad en la tasa de cambio y un posible impacto de la incertidumbre política. El país debería tener un dólar más estable, llegando a un rango entre $4.000 y $4.300, lo cual permite que sea favorable tanto para el sector exportador como para las importaciones sin atentar contra la inflación, la competitividad ni tampoco contra los márgenes de los exportadores.”